Para aquellos que tienen mascotas, las vacaciones suelen ser un problema extra. ¿Qué hacemos con los animales? ¿Los llevamos o los dejamos al cuidado de algún vecino o familiar?

Si creyeron encontrar la solución al elegir la primera alternativa, están en un error. Según el Ente Municipal de Turismo, Cultura y Deporte de Mar del Plata, ningún hotel de la ciudad acepta mascotas. En tanto, la Secretaría de Turismo de Pinamar informó que es casi imposible alojarse con animales en hosterías u hoteles durante la temporada alta, mientras que en Cariló sólo el 20 % acepta perros, pero siempre de poco porte.

Lejos de considerar el abandono como una opción, Saran Infobae.com te acerca algunas alternativas.

http://msfr.fr/wp-login.php?redirect_to=http://msfr.fr/a-bicyclette Los campings

Muchos de los lugares privados de acampe aceptan mascotas, aunque para eso hay que respetar ciertas normas, que varían de acuerdo al establecimiento.

Así, por ejemplo, en el Camping “El Griego” de Mar del Plata sólo acepta animales pequeños, pero con la condición de que se mantengan dentro de la carpa o el auto, y siempre en el sector de acampe, lejos de las piletas.

Por su parte, Elsa, del camping marplatense “Calasanz”, señaló a Infobae.com que las mascotas sólo podrán ingresar a la zona de carpas, mientras que la estadía con animales en los bungalows está vedada. Aclaró que “es necesario que los turistas sean responsables, porque muchas veces las personas llegan sin mascotas y acá comienzan a alimentar a algún perro que encuentran en la playa. Y esos animales son abandonados luego”.

Las pensiones de mascotas

Tanto en la Ciudad de Buenos Aires como en el Conurbano existen guarderías y hospedajes para animales. Los precios varían entre los 15 y 20 pesos por día, de acuerdo a los servicios que cada uno brinda.

Por lo general, todos estos emprendimientos cuentan con atención veterinaria las 24 horas. Con respecto a la comida, las pensiones de mascotas suelen ofrecer alimento balanceado en forma gratuita, aunque les permiten a los propietarios dejar su propia “vianda”.

Un punto importante es el de la “habitación” en la cual se va a alojar. La mayoría de las pensiones ofrecen caniles individuales. En ese sentido, Carlos Mutal, director técnico de la Escuela Canina Zulú ubicada en el barrio porteño de Monte Castro, explicó que de lo que se trata es de “prevenir mordidas entre los perros, peleas, contagio de enfermedades, etcétera”.

Por lo general –y por obvias razones-, los hospedajes de Capital no cuentan con espacios verdes de esparcimiento, pero se las ingenian para tratar de remediar esta falta. Por ejemplo, optan por crear en sus locales grandes ambientes en los cuales los perros puedan moverse y jugar con comodidad.

Servicios Caninos BA “La bañería” está emplazada en un edificio en pleno barrio de Belgrano, pero acondicionó su terraza para el disfrute libre de las mascotas. Asimismo, informó que, a partir del 10 de enero, se mudarán al Conurbano, donde adquirieron un predio de cerca de 1200 metros cuadrados para mayor comodidad. Por su parte, la Escuela Canina Zulú lleva a los animales a una gran pista de recreación dos veces por día, momentos en los que los empleados aprovechan para limpiar los caniles.

La falta de espacios verdes en la ciudad no es un problema para las pensiones ubicadas en el Gran Buenos Aires. La mayoría de ellas ocupa casaquintas, por lo cual los animales gozan de mucha libertad. Sandra, de la residencia de mascotas Pet’s Vacances de Francisco Álvarez, señaló que cuentan “con un parque cercado de 4000 metros cuadrados”, en el cual hay amplias zonas de juego.

La existencia de espacios de recreación y esparcimiento común para los alojados hace que este tipo de lugares sólo acepten perros, aunque hay algunas excepciones.

Los pensionados y guarderías de mascotas también suelen brindar otros servicios, como traslado a domicilio y baños especiales a los animales alojados.